Gonzalez Dubox, Raúl Eduardo


Estudiante de Antropología. Facultad de Ciencias Naturales y museo. UNLP. Guia del Museo de La Plata. Guía Interprete de la Reserva natural integral de Punta Lara (Prov. Bs.As.). Dibujante aficionado.

Ruiz Díaz, Jerónimo


Estudiante de Biología. Facultad de Ciencias Naturales y museo. UNLP. Fotografo aficionado. Completamente enamorado de la naturaleza!!!

viernes, 16 de abril de 2010

viaje en tren una aventura mas!




Ahí venia el tren no tan lejos, ni tan cerca… El alboroto de la gente… todos preparados para el evento… los que llegaban al pueblo, los vendedores, los viajeros que seguían viaje hacia otros destinos, todos movilizados por el tren.
El tren llego a la estación y nosotros con el equipo a cuestas, fuimos hasta el vagón de carga, es el que esta por detrás de la locomotora. Ahí no mas hablamos con el encargado para subir las bicicletas, creo que eran unos 40 pesos aprox. de deposito, por las dos bicicletas. Las subimos y fuimos a buscar asientos en clase turista (“Aguante” clase turista). Luego de tantas idas y venidas por fin estábamos en el tren a Misiones. Había muchas familias, y también muchos mochileros que tenían pensado visitar misiones, encontramos a algunos compañeros de facultad y gente con quien charlar. Todo parecía “normal” hasta que mas o menos a 20Km. de recorrido el tren, descarrilo, Sí!!! Se descarrilo!!! la escena parecía de película, el tren que se bamboleaba de un lado al otro, la gente gritando!!! Los niños llorando!!! Hasta que todo se detuvo (todo es el tren)…. Por suerte nadie salio herido.
No solo que se descarrilo, sino que se descarrilo “nuestro vagón” digamos el vagón en el que íbamos, que era el ante ultimo. Al ratito aparece personal del tren para informar lo sucedido y que iban a tratar de encarrilarlo para que siga viaje.
Estábamos en el medio de un pastizal (se puede entender como que estábamos en el medio de la nada!!!) con mucho calor (eran tipo las 14hs) la gente empezó a bajar a ver que había pasado, a simple vista se podía ver como se habían corrido las ruedas del tren.
Después de casi dos horas de intentos por encarrilarlo, decidieron soltar los vagones y seguir viaje. Esto significaba re acomodar a la gente de estos dos vagones en los lugares que había libre, que eran muy pocos por ciertos. Recuerdo que una persona del personal del tren nos dijo que busquemos asientos mas adelante en el tren. Encabezamos una caminata por el tren con toda la gente que se había quedado sin asientos. Tuvimos que sacar nuestro equipaje del vagón en el que estabamos. Así que básicamente íbamos cruzando cada vagón con todo a cuestas. Atrás nuestro mucha gente en la misma… llegamos hasta primera clase, en los anteriores vagones, no había lugar, de primera pasamos a camarote y de ahí al furgón de carga. Cuando llegamos al de carga había personal del tren almorzando. Viendo tal alboroto de gente preguntaron que porque estábamos allí. Y entonces Raúl dice: nos dijo uno de los guardas que acá hay lugar. Creo que fue el último bocado que tragaron esa gente al ver el despiole de gente que se les iba al humo. Decidimos quedarnos en primera aunque sea, parados… Había aire acondicionado y si teníamos que esperar horas hasta sentarnos, era mejor estar ahí que en otra parte del tren. Al rato de acomodar las cosas en los portaequipajes, se ven del otro lado del fuelle dos flacos, uno de pelo largo y otro de pelo corto rubio que al parecer estaban enojados por que les golpearon la puerta del camarote y los despertaron de su siesta. POBRECILLOS LOS SEÑORITOS… recuerdo a los dos flacos insultando y protestando del otro lado del fuelle, los teníamos bien enfrente. Creo que si se les ocurría cruzar para apenas alzarnos la voz la hubiesen pasado muy mal…. Jajaja!!!